John Locke

John Locke aboga por el empirismo, movimiento filosófico basado en que el conocimiento se adquiría a través de la experiencia, al grado que manifestó que ningún conocimiento puede ir más allá de ella. Dicho pensamiento sería fundamental para pensamientos posteriores y para la revolución científica. John Locke habla acerca del liberalismo político, donde el poder reside en la sociedad; misma que debía organizarse como una familia, donde un patriarca debe tener el absoluto poder. Los hombres viven en igualdad y libertad, teniendo tres derechos inalienables: la vida, la propiedad privada, la libertad, y el derecho a defender dichos derechos, que se añade. Todos los individuos están sometidos a las mismas leyes y en el mismo grado, teniendo incluso derecho a rebelarse. De las más más importantes aportaciones que realiza es el contrato social. La soberanía no está en manos del rey, sino en la sociedad, que se organiza para garantizarse los derechos que en la naturaleza no tendría. Las personas ceden derecho a darse justicia por su propia mano y se la dan al estado, que quedará como garante de sus derechos. Con el consentimiento de las personas, el estado vela por el cumplimiento de la ley y el respeto a los derechos de todos.